Why did I want to read it?

Regalito de Reyes de Dani Moñeco, por motivos obvios XD.

What did I get out of it?

Introducción

Poliamory:

[El poliamor] todo basado en tu esfuerzo individual por aceptar algo que nunca nadie te enseñó cómo aceptar. (p. 15)

Como 📖 Micropolítica del amor. Deseo, capitalismo y patriarcado:

rara vez se plantean si nuestras relaciones afectivas nos posicionan de manera diferente ante el nacionalismo, o ante la mercantilización, o ante las fronteras. Para la Academia monógama, las relaciones no-monógamas van de follar con mucha gente. Y así, de paso, se garantizan que no supongamos riesgo alguno para el status quo. (p. 16)

la multiplicación, en sí misma, no cambia nada substancial (p. 17)

Lo personal

El sistema monógamo

a pesar de la fuerza que tiene la idea de exclusividad sexual en la definición habitual de la monogamia, es una práctica con una alta tasa de excepcionalidades. Los bailes de cifras y estadísticas, aunque muy dispares entre sí, raras veces bajan de un 30% (…) ¿Qué pasaría si un 30% de personas vegetarianas comiese carne de vez en cuando? (…) La idea de exclusividad no viene a delimitar exactamente las prácticas (…) sino que viene a dar marca de legitimidad… (p. 28)

no tenemos imaginario para (…) la positivación del hecho de estar enamorada de alguien que se enamora también de otra persona. (p. 30)

El sistema monógamo es una herramienta de construcción del sujeto ensimismado, encerrado en sí mismo. Como tal, es evidente que el mandato del sistema no refiere a la reproducción como especie, sino a la supervivencia, reproducción y perdurabilidad del yo (concreto o grupal, del yo o del yo-nosotras): es una carrera de obstáculos infinita para garantizar la transmisión de lo mío más allá de mí. (p. 34)

Hasta cuándo la familia es un hervidero de violencias (…) La filiación, la familia, parece el único vínculo indeleble, incuestionable, irrenunciable: la única estructura de vínculo que estamos condenadas a acarrear de por vida, queramos o no y la única posibilidad de permanencia y refugio incondicional. (p. 35)

Patchwork (10). No resolvemos las cosas porque no aceptamos la muerte:

Detrás del Wapa, del Grindr, del Tinder y del Meetic. Porque la obsesión última de este sistema monógamo desde el que amamos y follamos es la pertenencia y, en consecuencia, la perdurabilidad (…) el miedo a la finitud. (p. 38)

La policía de la monogamia

Buenísimo 🤣:

¿Será natural, pues, esto de la monogamia? (…) ¿Alguien se ha puesto a estudiar si el capitalismo es natural y qué hormonas rigen la compra/venta o las burbujas inmobiliarias? (p. 40)

La movida identitaria:

¿Eres fumadora por fumarte un cigarro una noche de juerga? Acostarte con alguien de manera ocasional aún dentro del pacto monógamo podría ser una travesura que explicarle sin mayor problema a tu pareja a la mañana siguiente. O que explicarle con un poco de problema, pero sin mayor drama. Algo del tipo: «te prometí que no bebería pero al final me tomé un whisky». Pero no es así. (p. 44)

El imaginario monógamo nos convence, también, de que si amas de verdad (amas-de-verdad) no desearás a nadie más: la exclusividad deviene marca de autenticidad. (p. 49)

el mandato de la exclusividad con todos sus mecanismos entra en colisión con la construcción de masculinidad hegemónica. El constructo social de hombre-muy-hombre no puede ser objeto exclusivo de nadie, pues solo puede ser sujeto, con lo que su arquitectura de género queda atrapada en esa colisión entre el mandato de la exclusividad y el mandato de la proactividad. (p. 51)

Sea cual sea la línea donde ponemos la alteridad (y siempre es una línea móvil y oportunista) ese Otro (esa Otra) pasa a ser un objeto utilitario y una potencial enemiga. Por eso es necesario poner tanto énfasis en la fidelidad: para tratar de asegurarnos que esa persona que ahora se llama amiga no moverá de pronto la línea de la alteridad, no nos convertirá, sin más, en enemigas y toda la violencia se verá de pronto desatada. (p. 55)

Lo que propone como poliamor no es ni objetivar al tercero (sin cuidados), ni romantizarlo (para justificar así los cuidados). (p. 60)

Desmontar la monogamia es desmontar el sistema piramidal. No sirve reclamar una cumbre más ancha para los amores, porque mientras haya pirámide, el resultado es monógamo. (…) No vale competir en lo laboral y colaborar en lo amoroso: el cuerpo no nos deja… (p. 62)

la práctica monógama no es una práctica «mala» de por sí. El sistema en el que se afianza es un sistema violento, pero no lo es porque la práctica sea violenta: ha necesitado generar esa violencia en su estructura para imponerse… (p. 66)

Las herramientas del amo no desmontarán la casa del amo

Coincide con Micropolítica del amor. Deseo, capitalismo y patriarcado en no querer ofrecer una contrapropuesta fijada. (p. 80)

De aquellos lodos racistas, estos barros monógamos

  • La separación “Occidente” y “Oriente” viene según Ryszard Kapuściński de la batalla de las Termópilaa entre las polis griegas y el Imperio Persa. (p. 84)

En busca del tiempo (premonógamo) perdido

No es una cuestión simplemente de nomenclatura, sino que la aparición de los términos heterosexual y homosexual fue resultado de una clasificación médica y de la construcción de una normalidad y una anormalidad. Fuera de esa denominación y de los sistemas de opresión y violencia que sustentan, el hecho de tener relaciones sexo-afectivas con personas de tu mismo sexo/género no necesariamente supone una condición de la persona ni un factor diferenciador entre grupos humanos. (…) Estas clasificaciones no recogen la realidad, sino que la crean (p. 99)

Vaya con los gnósticos. Con razón casi caemos mi amiga Marta y yo en esa secta.

[Los gnósticos] veneraban el semen y la sangre menstrual como el cuerpo y la sangre de Cristo, respectivamente.» (p. 101)

Literalmente lo que estamos viendo hoy (2025-01-11) con Meta (ver Why is Mark Zuckerberg vice-signaling? - by Max Read):

«La violencia de la clase dominante no se limitó a reprimir a los transgresores. También apuntaba hacia una transformación radical de la persona, pensada para erradicar del proletariado cualquier comportamiento que no condujera a la imposición de una disciplina de trabajo más estricta. Las dimensiones de este ataque pueden verse en la legislación social que, a mediados del siglo XVI, fue introducida en Inglaterra y Francia. (p. 105)

Lo político

El pensamiento monogamo

Ser charnega no tiene tanto que ver con el origen geográfico sino con este origen cruzado por la clase social. No importa tanto de dónde vino tu familia sino cómo llegó y para qué. Ser charnega, pues, significa muchas cosas que tienen que ver con la clase… (p. 119)

La pareja monógama como la propiedad privada sobre el núcleo reproductor (p. 122)

«la estructura familiar y la estructura nacional tienen relaciones estrechas. La militarización y la centralización de la autoridad en un país implican automáticamente un recrudecimiento de la autoridad paterna. En Europa y en todos los países llamados civilizados o civilizadores, la familia es un fragmento de la nación» (p. 128)

Dreyfuss, John Wayne y el ejército español como ejemplos de Pensamiento Monógamo

Si 📖 Micropolítica del amor. Deseo, capitalismo y patriarcado conectaba la monogamia con esas dos estructuras opresivas, aquí conecta también con el nacionalismo:

La nación es intrínsecamente jerárquica, competitiva, excluyente/exclusiva y confrontacional. Para construir esa esencia común aglutinante, y para que sea lo bastante fuerte como para tener súbditos capaces de poner sus propias vidas particulares al servicio de los intereses de la corporación, es necesario hacerlo en términos monógamos. Y es a través del dispositivo cultura/raza que se articula para generar ese nosotros/ellos contextual y nombrado siempre desde las estructuras de poder. El aglutinante tiene como objetivo primordial la reproducción y transmisión histórica de esa esencia, el llamado ADN nacional, en un término que nos remite a la reproducción genética de la pareja. (p. 142)

Las entrañas

Fly me to the moon

El enamoramiento se llama en argot “NRE, New Relationship Energy”, y no es bueno. (p. 164)

Arrancar el amor de las garras del amor romántico no es sacarle emoción a las cosas: es salvarnos definitivamente de las violencias en nombre del amor. (…) Es ver la autosugestión a la que nos sometemos constantemente y qué servidumbres tiene. (p. 166)

La identificación se sugestiona y se construye bajo la mirada social: se hace pública la historia, aunque solo sea pública a nivel íntimo, con las amigas. Pero ya todo el mundo sabe que «esa» persona existe y posiblemente ya sepan infinidad de detalles sobre vuestra intimidad. No haríamos eso con una persona que acabamos de conocer y nos gusta mucho pero sin elemento Disney (posiblemente porque no hay sexualización de por medio). Podemos explicar que hemos conocido a alguien muy interesante, pero no explicamos una y otra y otra vez de qué manera os conocisteis, dónde fuisteis a cenar, qué os dijisteis y todo eso. (…) Y eso mantiene nuestras relaciones no románticas en espacios más sanos (p. 187).

El deseo, de hecho, es nuestro, y no paramos de huir de él para entregárselo a otros. Podemos disfrutarlo, podemos sentirlo intensamente y llenarnos de vida por el simple hecho de estar deseando, igual que lo hacemos en infinidad de facetas de nuestras vidas. (p. 195)

Toda la gestión deseo y su reciprocidad se puede gestionar de manera consciente:

  • No hay ni por qué buscar reciprocidad en el deseo
  • See puede disfrutar de esa coincidencia si se da, pero tampoco hay que actuar obligatoriamente cuando se da.
  • Se puede y se debe saber de antemano qué se va buscando, o romantizaremos de manera invisible.
  • “Se pueden echar polvos en un lavabo con una desconocida y que sean cuidadosos y bonitos”. Evitar la idea de solo “invertir” cuando vamos a por algo a medio plazo.

…es importante saber si la nueva persona es monógama excluyente y está aceptando la situación porque es lo que se ha encontrado o realmente hay una intención de construir red como horizonte. Porque lo más importante en estas construcciones es quererlas, es tenerlas como tu horizonte relacional y no solo como una contingencia que acarreas. (p. 197)

Terror poliamoroso

Terror poliamoroso es el pavor, también real, a no tener a nadie que organice la vida contigo y en torno a ti. Todos estos terrores son reales: en un mundo montado para y por la pareja, cualquier otra opción de vida es un vértigo constante. (p. 200)

The Poly Majority

We are NICE: negotiated, individualized, consensual, and egalitarian. (p. 211)